Teorías Administrativas
Teoría
Administrativa de Taylor
La teoría de la administración científica surgió, en
parte, por la necesidad de elevar la productividad. A principios del siglo XIX,
en Estados Unidos en especial, había poca oferta de mano de obra. La única
manera de aumentar la productividad era elevando la eficiencia de los
trabajadores. Así fue como Frederick W. Taylor, Henry L. Gantt y Frank y
Lillian Gilbreth inventaron los principios que en conjunto forman la teoría de
la administración científica.
A principio de del siglo XX,
Frederick W. Taylor propone la sustitución del empirismo y la improvisación, y
propone un enfoque científico que asegurara mayor productividad del operario en
la fábrica. Para esto, propuso seleccionar y entrenar adecuadamente a los
operarios, ubicándolos según sus cualidades físicas, en aquellas actividades en
las que aseguraran mejores resultados; a través del estudio de tiempos y movimientos
en el trabajo, estableció estándares de producción que debían ser alcanzados
por los operarios. Modificó los sistemas de remuneración para que los salarios
se otorgaran según el rendimiento individual. Sostenía que a mayor
productividad, o mayor cantidad de unidades producidas por un trabajador se
generarían ganancias para la empresa, lo que lleva al trabajador a obtener
mayores beneficios económicos. Es decir, habría beneficios para ambas partes.
Fundamentó su filosofía en cuatro principios básicos:
1. El desarrollo de una verdadera ciencia de la
administración.
2. La selección científica de los trabajadores.
3. La educación y desarrollo del trabajador en forma
científica.
4. La cooperación estrecha y amistosa entre obreros y
patrones.
Taylor pensaba que tanto obreros como patrones tenían el
mismo interés en elevar la productividad.
Fundamentó su sistema de producción en estudios de tiempo
en la línea de producción.
Estableció el sistema de tasas diferenciales.
Teoría
Administrativa de Henry Ford
En
1878 Henry Ford efectúo sus primeras observaciones sobre la industria del
trabajo en la industria del acero. A ellas le siguieron, una serie de estudios
analíticos sobre tiempos de ejecución y remuneración del trabajo. Sus principales
puntos, fueron determinar científicamente trabajo estándar, crear una
revolución mental y un trabajador funcional a través de diversos conceptos que
se intuyen a partir de un trabajo suyo publicado en 1903 llamado Shop
Management.
Aportes
a la Administración
Disminución de los tiempos
de producción mediante el uso eficiente de la maquinaria y las materias primas
y la distribución acelerada de sus productos.
Reducción de inventarios en proceso.
Aumento de la producción
debido a la especialización del trabajo y al empleo de la línea de producción.
Salario mínimo por día y
hora y jornada máxima laboral de 8 horas.
Desarrollo vertical (desde
la materia prima hasta el producto terminado) y horizontal (desde la
manufactura hasta la distribución).
Líneas propias de crédito para la financiación de los
vehículos.
Cedió acciones de la Ford
Motor Co. a sus trabajadores, con el fin de incrementar los ingresos de los
empleados.
Teoría de Abrahán Maslow
Una
de las muchas cosas interesantes que Maslow descubrió mientras trabajaba con
monos muy al principio en su carrera fue que ciertas necesidades prevalecen
sobre otras. Por ejemplo, si estás hambriento o sediento, tenderás a calmar la
sed antes que comer. Después de todo, puedes pasarte sin comer unos cuantos
días, pero solo podrás estar un par de días sin agua. La sed es una necesidad
más fuerte que el hambre. De la misma forma, si te encuentras muy, muy
sediento, pero alguien te ha colocado un artefacto que no permite respirar,
¿cuál es más importante? La necesidad de respirar, por supuesto. Por el otro
lado, el sexo es bastante menos importante que cualquiera de estas necesidades.
Maslow
recogió esta idea y creó su ahora famosa jerarquía de necesidades. Además de
considerar las evidentes agua, aire, comida y sexo, el autor amplió 5 grandes
bloques: las necesidades fisiológicas, necesidades de seguridad y
reaseguramiento, la necesidad de amor y pertenencia, necesidad de estima y la
necesidad de actualizar el sí mismo; en este orden.
Las
necesidades fisiológicas. Estas incluyen las necesidades que tenemos de
oxígeno, agua, proteínas, sal, azúcar, calcio y otros minerales y vitaminas.
También se incluye aquí la necesidad de mantener el equilibrio del PH (volverse
demasiado ácido o básico nos mataría) y de la temperatura (36.7 ºC o cercano a
él). Otras necesidades incluidas aquí son aquellas dirigidas a mantenernos
activos, a dormir, a descansar, a eliminar desperdicios (CO2, sudor, orina y
heces), a evitar el dolor y a tener sexo. ¡Menuda colección!.
Maslow
creía, y así lo apoyaba sus investigaciones, que éstas eran de hecho
necesidades individuales y que, por ejemplo, una falta de vitamina C conduciría
a esta persona a buscar específicamente aquellas cosas que en el pasado
proveían de vitamina C, por ejemplo el zumo de naranja. Creo que las
contracciones que tienen algunas embarazadas y la forma en que los bebés comen
la mayoría de los potitos, apoyan la idea anecdóticamente.
Las
necesidades de seguridad y reaseguramiento. Cuando las necesidades fisiológicas
se mantienen compensadas, entran en juego estas necesidades. Empezarás a
preocuparte en hallar cuestiones que provean seguridad, protección y
estabilidad. Incluso podrías desarrollar una necesidad de estructura, de ciertos
límites, de orden.
Viéndolo
negativamente, te podrías empezar a preocupar no por necesidades como el hambre
y la sed, sino por tus miedos y ansiedades. En el adulto medio norteamericano,
este grupo de necesidades se representa en nuestras urgencias por hallar una
casa en un lugar seguro, estabilidad laboral, un buen plan de jubilación y un
buen seguro de vida y demás.
Las
necesidades de amor y de pertenencia. Cuando las necesidades fisiológicas y de
seguridad se completan, empiezan a entrar en escena las terceras necesidades.
Empezamos a tener necesidades de amistad, de pareja, de niños y relaciones
afectivas en general, incluyendo la sensación general de comunidad. Del lado
negativo, nos volvemos exageradamente susceptibles a la soledad y a las
ansiedades sociales.
En
nuestra vida cotidiana, exhibimos estas necesidades en nuestros deseos de unión
(matrimonio), de tener familias, en ser partes de una comunidad, a ser miembros
de una iglesia, a una hermandad, a ser partes de una pandilla o a pertenecer a
un club social. También es parte de lo que buscamos en la elección de carrera.
Las
necesidades de estima. A continuación empezamos a preocuparnos por algo de
autoestima. Maslow describió dos versiones de necesidades de estima, una baja y
otra alta. La baja es la del respeto de los demás, la necesidad de estatus,
fama, gloria, reconocimiento, atención, reputación, apreciación, dignidad e
incluso dominio. La alta comprende las necesidades de respeto por uno mismo,
incluyendo sentimientos tales como confianza, competencia, logros, maestría,
independencia y libertad. Obsérvese que esta es la forma alta porque, a
diferencia del respeto de los demás, una vez que tenemos respeto por nosotros
mismos, ¡es bastante más difícil perderlo!.
No
obstante que Maslow presenta este orden de prioridad, considerado como el orden
normal o lógico; en diferentes etapas de nuestra vida y ante determinadas
circunstancias, el orden puede variar; es más, conocemos casos de personas que
anteponen aun a necesidades fisiológicas, necesidades de autorrealización, pero
esto no sucede en la mayoría de los individuos y quizá tampoco en todas las
circunstancias.